No solo la cafeína influye
El café se ha convertido en una bebida fundamental para comenzar el día con energía. Muchas personas no pueden iniciar su rutina sin una taza. Sin embargo, este hábito matutino puede generar un efecto laxante que ha sido observado por gran parte de sus consumidores.
El café y el baño: una conexión común
El médico de familia Dani G. Tobías explicó recientemente que esta reacción no se debe únicamente a la cafeína. En un video compartido en su canal de TikTok Consulta Abierta, el especialista, seguido por más de 60 mil personas, aclaró que incluso el café descafeinado produce un efecto similar.
Se señaló que el café con cafeína genera un efecto laxante un 60% mayor que el agua, mientras que el descafeinado alcanza un 23% más. Por lo tanto, se concluye que la cafeína no es la única responsable.
Moléculas con nombres complejos
El experto atribuyó este efecto a la presencia de dos compuestos: ácido clorogénico y NH-alcanoil-5-hidroxitriptamina. Aunque difíciles de pronunciar, estas moléculas influyen en el sistema digestivo. Sin embargo, no son los únicos factores implicados.
El reflejo gastrocólico y otros efectos
Además, se destacó el papel del reflejo gastrocólico, una respuesta natural del cuerpo en la que comer o beber activa el intestino. Este fenómeno se acentúa por la mañana debido al ritmo circadiano, cuando la actividad intestinal aumenta.
Las hormonas digestivas influyen también
El efecto también puede estar relacionado con las hormonas digestivas. La cafeína libera gastrina y colecistoquinina, hormonas que estimulan el movimiento intestinal. Esta interacción química contribuye a la necesidad de evacuar tras consumir café.
¿Y si es la leche?
Por último, el especialista planteó una posibilidad adicional: el responsable podría no ser el café en sí, sino la leche. En personas con intolerancia a la lactosa, el consumo de café con leche puede producir un efecto similar.
En otra publicación, Tobías explicó que el café quita el sueño porque la cafeína bloquea la adenosina, la molécula que induce el descanso. Así, no solo activa la mente, sino también el cuerpo.