Un cosmético hidratante y antioxidante
Los sérums de vitamina C son productos que se han vuelto muy populares en los últimos años por sus múltiples beneficios para la piel.
Estos sérums son concentrados que se aplican después de la limpieza y el tónico y antes de la crema hidratante, y que penetran profundamente en la epidermis para actuar sobre los signos del envejecimiento, las manchas, la falta de luminosidad y la protección frente a los agentes externos.
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¿Qué es la vitamina C y para qué sirve?
La vitamina C es un nutriente esencial que nuestro organismo no puede producir por sí mismo, por lo que debemos obtenerlo a través de la alimentación o de suplementos.
Esta vitamina tiene muchas funciones importantes, como reforzar el sistema inmunológico, favorecer la absorción del hierro, participar en la síntesis del colágeno y de glóbulos blancos.
Este es un nutriente que, al ser soluble en agua, se expulsa a través de la orina y tiende a mantenerse en los niveles necesarios para el cuerpo con facilidad. Además, se trata de una de las sustancias más importantes para el sistema inmunitario del cuerpo .
Ayuda a mejorar la respuesta ante diversas enfermedades.
¿Qué beneficios tiene el sérum de vitamina C para la piel?
El sérum de vitamina C es un cosmético que aprovecha las propiedades de esta vitamina para mejorar el aspecto y la salud de la piel.
Algunos de los beneficios que podemos obtener al usar un sérum de vitamina C son:
- Suavizar las arrugas y las líneas finas, estimulando la producción de colágeno y elastina²³.
- Reafirmar la piel en caso de pérdida de tono, aportando firmeza y elasticidad²³.
- Aclarar las manchas del rostro, actuando sobre la hiperpigmentación cutánea y unificando el tono²³.
- Proteger la piel de la contaminación, el smog y la luz solar, neutralizando los radicales libres que causan el estrés oxidativo y el envejecimiento prematuro²³.
- Nutrir e hidratar la piel, gracias a su capacidad para retener la humedad y evitar la pérdida transepidérmica de agua²³.
- Refrescar la tez durante la temporada de calor, aportando una sensación de frescor y vitalidad²³.
- Purificar la piel mixta y grasa, regulando la producción de sebo y evitando el exceso de brillo²³.
- Refinar la textura de la piel, minimizando los poros y reduciendo la aparición de puntos negros²³.
¿Cómo aplicarlo correctamente?
El sérum de vitamina C se puede usar tanto por la mañana como por la noche, siempre después de limpiar y tonificar bien la piel.
Se recomienda aplicar unas gotas sobre el rostro, el cuello y el escote, y masajear suavemente hasta su completa absorción. Después se puede aplicar una crema hidratante o nutritiva según el tipo de piel.
Es importante evitar mezclar el sérum de vitamina C con otros productos que contengan retinoides o ácidos exfoliantes, ya que pueden irritar o sensibilizar la piel. También se debe usar siempre un protector solar durante el día, ya que la vitamina C puede aumentar la fotosensibilidad.
Vitamina C de manera natural
Además de usar un sérum de está vitamina como cosmético, también podemos obtener esta vitamina de forma natural a través de los alimentos o preparando nuestros propios suplementos caseros.
Algunas fuentes naturales ricas en vitamina C son:
- Los cítricos, como las naranjas, los limones y las toronjas, que contienen hasta 10 veces más vitamina C que el jugo.
- Los frutos rojos, como las fresas, los arándanos y las frambuesas, que además de vitamina C aportan antioxidantes y fibra.
- Los kiwis, que tienen más vitamina C que las naranjas y también son ricos en potasio y magnesio.
- Las verduras de hoja verde, como las espinacas, el brócoli y el kale, que contienen vitamina C y otros nutrientes esenciales como el hierro, el calcio y el ácido fólico.
- Los pimientos, especialmente los rojos, que tienen más está vitamina que los cítricos y también son una buena fuente de vitamina A y carotenoides.
Para preparar nuestros propios suplementos caseros de vitamina C, podemos usar cáscaras de cítricos secas y molidas, que conservan la mayor parte de la está vitamina.
El procedimiento es el siguiente:
- Lavar bien las cáscaras de naranja o limón frescas y ponerlas en una bandeja para hornear.
- Calentarlas a 40 ºC durante 18 o 24 horas, hasta que estén secas, deshidratadas y crujientes.
- Pasarlas por un molinillo para hacerlas polvo y almacenarlas en un frasco hermético a temperatura ambiente.
- Agregar una cucharada de polvo de vitamina C en los batidos, ensaladas o un vaso de agua tibia.
Como ves, está vitamina es un nutriente muy importante para nuestra salud y belleza.
No solo podemos usarla en forma de sérum para mejorar nuestra piel, sino que también podemos consumirla de forma natural o casera para fortalecer nuestras defensas.
¿Te animas a probarlo?