Receta Saludable de Hot Cakes de Avena
Introducción
Para aquellos que buscan reducir las harinas y grasas en su dieta, los Hot Cakes de Avena son una excelente opción. Estos hot cakes, libres de harina, pueden ser disfrutados con un poco de mantequilla, miel de maple, mermelada o tu topping favorito. Aunque no son ideales para la dieta, son irresistibles.
Los Hot Cakes de Avena y Plátano
Hoy les presentamos unos hot cakes de avena y plátano, muy saludables, con casi nada de grasa, sin harina y con una consistencia agradable. No notarán la falta de harina en ellos y sí, son deliciosos.
Ingredientes
Para 8 unidades necesitarás:
- 230 g de avena en hojuelas
- 300 ml de leche
- 2 plátanos maduros
- 5 g de canela en polvo
- 3 g de estevia
- 1 pizca de sal
- 10 ml de extracto de vainilla
- 6 g de polvo para hornear
- 1 huevo
- 10 g de mantequilla
Preparación de los Hot Cakes de Avena y Plátano
La preparación de estos es sencilla y solo necesitarás una licuadora. Primero, añade la leche, los plátanos, la vainilla, la estevia o azúcar, la sal y procesa durante unos segundos. Luego, agrega las dos tazas de avena, la canela y el polvo para hornear. Deja que la licuadora trabaje durante un minuto o dos hasta que la mezcla sea suave y no se perciban las hojuelas de avena. Por último, agrega el huevo y procesa ligeramente para que se integre.
Calienta una sartén y derrite la mantequilla para engrasarla. Luego, vierte una porción de la masa, aproximadamente 1/4 de taza. Espera a que los bordes se doren y comiencen a salir burbujas en la superficie y luego voltea, aproximadamente 2 minutos por lado.
¿Cómo Servir los Hot Cakes de Avena y Plátano?
Esta es una excelente receta para aprovechar los plátanos maduros. Este platillo tiene un sabor ligeramente dulce gracias al plátano, y si procesas muy bien la avena en la licuadora, ni siquiera te darás cuenta de que está ahí.
Acompáñalos con un trocito de mantequilla, que ya no es pecado pues no hemos usado grasa para hacer la masa, alguna mermelada, cajeta o hasta nutella, al gusto de cada quien, y desde luego un buen vaso de leche. ¡Buen provecho!