La articulación sacroilíaca, una fuente común de molestias
Si sufres de dolor de espalda baja, es posible que la causa sea una inflamación o lesión de la articulación sacroilíaca.
Esta articulación se encuentra entre el hueso sacro y el hueso ilíaco, y permite la conexión entre la columna vertebral y la pelvis.
Cuando se irrita o se daña, puede provocar dolor lumbar, que se irradia hacia las nalgas, las ingles o las piernas.
El dolor de la articulación sacroilíaca es una causa frecuente de dolor bajo de espalda, pero muchas veces no se diagnostica correctamente.
Esto puede llevar a tratamientos ineficaces o inadecuados, que no alivian las molestias.
Por eso, es importante consultar con el médico y realizar pruebas específicas para confirmar la causa del dolor.
Un ejercicio isométrico para movilizar y estirar la zona
Una vez diagnosticado el problema, se pueden realizar ejercicios pautados para mejorar las molestias.
El entrenador personal Víctor Téllez explica un ejercicio que puede ayudar a los pacientes con dolor de la articulación sacroilíaca.
Se trata de un ejercicio isométrico, que consiste en mantener una postura fija sin mover los músculos, pero generando tensión en ellos.
Para realizar este ejercicio, solo necesitas un ladrillo de yoga y una pequeña altura para apoyar una de las rodillas y mantenerla en el aire.
El ejercicio consiste en mantener la postura y respirar para, poco a poco, movilizar la zona inflamada y estirar los ligamentos profundos de la cadera.
Es importante hacer el ejercicio con cada pierna, primero una y luego la otra, ya que, tal como señala Téllez, es difícil saber si la inflamación procede de un lado o de otro.
Este ejercicio puede ayudar a aliviar el dolor de espalda baja causado por la articulación sacroilíaca, pero no es el único.
También es recomendable seguir otras medidas como aplicar calor o frío en la zona, evitar movimientos bruscos o posturas forzadas, y tomar antiinflamatorios o analgésicos según prescripción médica.