Chicharrón en dieta equilibrada

Equilibrio con chicharrón

Se ha señalado que el chicharrón puede ser incluido en un plan alimenticio siempre que se consuma con moderación. En este apartado se revisarán sus características principales y las recomendaciones para obtener sus beneficios sin comprometer la salud.


Recomendado ↓


Perfil nutricional del chicharrón

El chicharrón es caracterizado por proveer alto contenido de grasa y proteínas, sin que se registren carbohidratos cuando no es cocinado en aceite. Se considera que, en una porción de 100 gramos, son aportadas 544 calorías, distribuidas en un 50 % de grasa y un 50 % de proteína. Este balance le otorga un elevado poder energético.

Beneficios aportados

Es reconocido que el chicharrón contiene colágeno, elemento clave para la elasticidad de la piel y el mantenimiento del cartílago en las articulaciones. Además, se ha observado la presencia de ácido oleico, la misma grasa monoinsaturada que se halla en el aceite de oliva, la cual resulta beneficiosa para la salud cardiovascular. Gracias a su riqueza proteica, se genera sensación de saciedad, lo que puede ayudar a controlar el apetito.

Precauciones y moderación

Cuando el chicharrón es frito en manteca, su proporción de grasas saturadas se incrementa, lo que podría aumentar el riesgo de enfermedades cardíacas. Asimismo, se debe considerar que es aportado un alto contenido de sodio, factor que puede influir negativamente en la presión arterial y la función renal.


Por sí te lo perdiste ↓


Consejos para su consumo

Para maximizar sus virtudes y minimizar sus inconvenientes, se recomienda que el chicharrón sea preparado sin aceite adicional y acompañado de alimentos ricos en fibra, como verduras frescas o ensaladas, de forma que se mejore su perfil nutricional.

En conclusión, el chicharrón puede ser integrado en una dieta equilibrada si se limita su ingesta, se evitan frituras excesivas y se procura conjuntarlo con alimentos saludables. De este modo, se aprovechan sus aportes de proteínas, colágeno y ácido oleico, sin sacrificar el bienestar general.

SourceEl Tiempo

Entradas Relacionadas